Miles de evacuados por los devastadores incendios forestales que arrasan Corea del Sur
Seúl, Corea del Sur – Los incendios forestales que arden desde el pasado viernes han causado graves daños en Corea del Sur, destruyendo más de 200 estructuras, incluyendo un antiguo templo budista, viviendas, fábricas y vehículos. Además, alrededor de 27.000 personas han sido evacuadas de sus hogares, según informaron las autoridades.
Un desastre de gran magnitud
En un discurso televisado, el presidente interino de Corea del Sur, Han Duck-soo, declaró que estos incendios están provocando daños más graves que muchos otros incendios forestales en la historia reciente del país. Las llamas han arrasado grandes extensiones de bosque y han obligado a las autoridades a desplegar equipos de emergencia en las zonas afectadas para contener la situación.
Causas y respuesta de emergencia
Los incendios comenzaron el viernes y se han visto intensificados por fuertes vientos y altas temperaturas, dificultando las labores de extinción. Brigadas de bomberos, militares y equipos de rescate han sido desplegados en las regiones más afectadas, mientras que aviones y helicópteros han estado arrojando agua sobre las llamas en un esfuerzo por frenar su avance.
Las autoridades han advertido que la situación sigue siendo crítica y que podrían producirse más evacuaciones si el fuego continúa extendiéndose. Mientras tanto, los residentes de las zonas cercanas han sido instados a seguir las indicaciones de seguridad y mantenerse informados a través de los canales oficiales.
Preocupación por el impacto ambiental y patrimonial
Uno de los mayores daños reportados ha sido la destrucción de un antiguo templo budista, cuya pérdida ha generado gran conmoción en la población. Además, los incendios han devastado grandes áreas de bosques, lo que podría tener graves repercusiones ambientales a largo plazo.
El gobierno surcoreano ha prometido brindar apoyo a los afectados y ha declarado que se están evaluando medidas para prevenir incendios forestales de esta magnitud en el futuro.
La comunidad internacional sigue de cerca la situación en Corea del Sur, mientras los equipos de emergencia trabajan sin descanso para controlar los incendios y minimizar los daños.